Reseña

Hay escritores que en el anonimato maduran sus obras como si fuesen vinos añejos, este es el caso de Edison Díaz, que se presenta por primera vez en el mundo de la narrativa con Trigo, una novela que no parece una opera prima, sino una tercera o cuarta obra de un escritor que se toma la literatura en serio. Esta novela nos narra la trama de la novela misma, como si fuese un ser decadente en movimiento que le va dando vida a sus propios elementos. Aquí los personajes (el maestro Julio Mejía, el escritor fracasado John Cantor, la amiga Alicia Gaona, un pícaro escritor argentino, un soberbio crítico literario y un compilador, entre muchos otros) son piezas de un juego de escritura, de un ensamblaje que nos va mostrando los escenarios más oscuros en donde el libro se gesta y se desenvuelve hasta ver la luz. Podríamos afirmar que Trigo es una novela de formación, una especie de teoría de la novela en movimiento.