Habilidades blandas y el aprendizaje experiencial en los estudiantes de educación superior
Autores: | Piscoya Vargas, César Augusto Torrel Pajares, Teófilo Severino Vilchez Muñoz, José Luis |
La formación educativa universitaria actualmente debe ser en base al desarrollo de habilidades blandas asimismo en habilidades cognitivas, permitiendo un desempeño eficientemente en el campo laboral, esto garantiza un perfil profesional con el desarrollo de ambas habilidades y satisfacer las demandas de empleabilidad, siendo necesario incorporar en las mallas curriculares los enfoques de formación de habilidades blandas y práctica en el ámbito donde se desempeñará el futuro profesional. Los objetivos del presente estudio fueron: evaluar el efecto del aprendizaje experiencial en el desarrollo de las habilidades blandas en los estudiantes universitarios y evaluar los resultados de la pre-prueba y post-prueba midiendo la efectividad del programa de intervención.
Se consideró una muestra de 220 estudiantes para el primer estrato y segundo estrato 220 educandos, se usó el cuestionario como instrumento que contiene un conjunto de indicadores referidos a medir las variables de estudio, el primer cuestionario estuvo dirigido a medir la variable “aprendizaje experiencial”, el cual contempla 28 ítems repartidos en cuatro dimensiones, el segundo cuestionario se midió la variable “habilidades blandas”, el cual tiene 46 reactivos distribuidos en 8 dimensiones.
Los datos fueron analizados, permitiendo contrastar las hipótesis estadísticas de acuerdo con los objetivos, se realizó la determinación del efecto del aprendizaje experiencial sobre el desarrollo de las habilidades blandas y se utilizó la prueba estadística de t de student y el comportamiento de las habilidades blandas en los estudiantes en la pre-prueba y post-prueba, aplicándose el análisis de varianza –ANOVA– y la prueba de Dunnet.
Los promedios de los porcentajes de las dimensiones del aprendizaje experiencial fueron: experiencia concreta con 80.92%, conceptualización abstracta con 82.26%, aplicación o experiencia práctica con 80.84%, además de observación-reflexión con 80.89%; estos valores permitieron obtener un efecto positivo en la evolución de las habilidades que se indican a continuación: habilidades sociales con 87.76%, conciencia de uno mismo con 87.21%, autorregulación con 85.55% y motivación con 90.49%.
La comparación de los promedios de los porcentajes de la pre-prueba y la post-prueba se encontraron diferencias altamente significativas (p < 0.01), siendo la post-prueba la que alcanzó mayores porcentajes (87.70%).