Reseña

Los tiempos emergentes han configurado la realidad desde todos los escenarios posibles, invitando a repensar la cotidianidad para adaptarla a los nuevos retos y desafíos que impone el mundo actual. En ese sentido, la educación como derecho inalienable del sujeto y como eje transversal de la formación ciudadana, no es ajena a las transformaciones constantes y a la inconstancia de las dinámicas globales existentes.
Para ello, pensar el acto educativo desde la contemporaneidad, conlleva a establecer vínculos entre la formación docente y la práctica pedagógica, a reflexionar sobre las dicotomías que surgen entre tecnología y educación, así como también a realizar un análisis profundo sobre las brechas educativas, sociales y generacionales que emergen como tendencias en la complejidad de este nuevo paradigma. Así pues, todos estos aspectos están orientados a la reflexión didáctica y curricular que exige la deconstrucción de sus estructuras tradicionales para apuntar hacia una nueva formación humanista, pensada desde la interconexión de la tecnología, el currículo y la cultura; contribuyendo a la implementación de metodologías congruentes con las necesidades de cada sociedad.