Reseña

En el marco de la antropología pedagógica, este libro aborda dos ámbitos poco explorados en el campo pedagógico de habla hispana. En primer lugar, la relación entre evaluación y formación (Bildung en la tradición pedagógica alemana), con lo cual busca superar el énfasis que históricamente ha tenido lo evaluativo en el aprendizaje, más aún en el contexto neoliberal de la actualidad y sus discursos en torno al rendimiento y a la realización personal de los estudiantes, aprovechando su alto impacto emocional, social, académico e ideológico. En segundo lugar, esta concepción formativa es llevada a la educación de los niños ?bien desde la idea del Preescolar o de la Primera Infancia? en cuyo campo parece inexistente la evaluación por no darse de manera formal, pro se da investida de refuerzos como caritas felices, sellos o menciones de honor, los cuales sirven para compararlos, clasificarlos, rotularlos y excluirlos. Esta dinámica de premio y castigo solo concibe a los niños como proyecciones a futuro, adiestrándolos para cuando sean adultos, de acuerdo con las demandas de calidad de los sistemas escolar y social. Ante este contexto, tanto los fundamentos teóricos como las descripciones, interpretaciones y valoraciones realizadas en una institución alternativa muestran la manera en que es posible hacer que la evaluación incida en la formación de estos ?cachorros de la especie humana?, superando los discursos del niño como ser carente o infantilizado, y reconociendo su valor en cuanto persona, justamente como niño, hoy y ahora.