Reseña

Tocando fondo son relatos de la praxis de la convivencia en momentos ya vividos. Van expresando el amor desesperanzado donde la alegría no dura, ese algo desaprendido que lleva a la comprensión de la tristeza como sentido del ser. El texto recoge crónicas a través de narraciones poéticas, autobiográficas, que sellaron la vida de los y las protagonistas. Son la forma de narrar experiencias de personajes que la historia oficial no tiene tiempo, ni tinta para darles la importancia que dejaron sus huellas imborrables en la historia de la humanidad.
El laberinto nos lleva de la mano por senderos que diariamente transitamos, sin darnos cuenta de que llevamos inmersos estos espacios en nuestra propia existencia. Así mismo, viajar por la crónica de un sueño, donde la capacidad de confrontarse da pie a confrontar al lector con su propia realidad, para llegar en un momento fugaz y adentrarse en la zona espiritual del ser humano, conversar con Dios, de la misma manera que se conversa con otra persona de confianza, en momentos difíciles que se viven diariamente en este país. La participación denunciada en la construcción de sociedad, trabajo nada fácil que les ha costado a los dignatarios y dignatarias de los diferentes barrios de esta ciudad para construir su propia realidad frente al capitalismo salvaje, modelo actual que lleva de la mano a los ciudadanos a trabajar con ahínco pero sin ningún “costo”, a no ser su propia pecunia y la posibilidad de trasformar sus propios imaginarios de vida. Y finalmente, Semilla que salió del fango es el protagonista de esta crónica que ha permitido adentrarnos en la matriz de la problemática social para mostrar una realidad que cada día absorbe a la población más vulnerable, la infantil, arrastrándola a los confines de la barbarie, mientras la vida trascurre sin piedad. Tocando fondo finaliza con la aventura de Viajar desde todos los sentidos para encontrarse con su equivalente.