Reseña

¿Cuántas veces hemos visto pasar a nuestro lado a esa persona que puede ser la de nuestros sueños y cuántas veces no hemos hecho nada al respecto porque no encontramos que decir?
¿Acaso no es esa compañera de la universidad o ese apuesto amigo de un amigo con quien quisiéramos compartir más que el saludo?

Mírame que te estoy mirando puede dar a quien busque en sus páginas, la forma de aproximarse a quien estando tan cerca se encuentra tan lejos, y por fin dejar el miedo que siempre depara el romper el hielo cuando se trata de hacerlo con alguien que nos interesa.

Con un lenguaje fresco y casual el “poeta que no era poeta” ha colmado este libro de frases llenas de verdad y elocuencia para decir por vez definitiva, a esa persona que nos gusta en secreto, que la hemos estado mirando y que nos gustaría que también nos mirara de vez en cuando.