Reseña

Esta novela abre la puerta del microcosmos de la mujer que recuerda una relación de pareja frente a la pasión y la sexualidad en la mitad de su vida. Del hombre que mira los altibajos del deseo y la cotidianidad desde un lugar en el que intenta adaptarse.
¿Qué mueve a estos seres bullentes y apasionados? ¿Qué comparten en el vacío y la fragmentación?
Antonio Correa despliega los claroscuros de una naturaleza inclemente que ilumina la existencia con ráfagas de esplendor y amenaza. O de la mujer, quien desde su jardín ve el cielo tenue y despejado que se refleja en una constelación inapelable.
Una breve y entrañable novela, donde la posibilidad del lenguaje hace brotar un volcán oculto en la fragilidad de la memoria.