Donde está ese calendario había el dibujo de un molino
Autor: | Agudelo Zuluaga, Jorge Iván |
Colaboradores: | Jaramillo Acevedo, Juan Camilo (Editor Literario) Castro Gaviria, Eliana (Editor Literario) Santa Escobar, Luisa Fernanda (Diseñador) Jiménez González, Daniela (Editor Literario) |
En el poemario Donde está ese calendario había un dibujo de un molino, de Jorge Iván Agudelo, la borrachera es una corriente y el guayabo es un trance telúrico en un paraíso corroído hecho de cualquier cosa, menos de diversión. El poeta ve, con recelo, cómo los “hígados nuevos” asisten a la nueva “ronda del degüello”.
Con sus imágenes vertiginosas, el narrador —el borracho—, se despeña. Bracea furioso, da bandazos contra el mundo, se estiran los márgenes de la realidad como “una licorera infinita”, y se estira también el cauce del río etílico para que floten en él las botellas vacías. Flotan en esta serpiente de agua, también, los ojos aterrados y desorientados del poeta. La llegada de la mañana obliga al borracho a limpiar, a lavar su mirada. Las aguas rezagadas de la noche arrastran a los “indecisos péndulos a la orilla”. La fiesta se rompe como se quiebran ciertas cosas amadas, con ira y con ternura: (“quebrarse /rotunda /como una botella”).
Un poemario sobre los vicios, enmarcado en una ciudad, Medellín, que acoge y repele, que invita a llegar hasta el final de la fiesta, a pesar de sus consecuencias.
El alcohol es aire y también se respira.