Reseña

Algunos noventa años después de la crucifixión de nuestro Señor Jesu-
cristo, nuestro Hermano Juan escribió estas palabras para recordar a los
creyentes de lo serio del Evangelio: Este es el MENSAJE que hemos oído
de Él, y os anunciamos: Dios es luz y no hay ningunas tinieblas en Él. (1ª
Juan 1:5). Algunos años antes, el Hermano Pablo escribió: Si alguno os
predica diferente evangelio del que habéis recibido, sea anatema.
Entonces, cualquier desviación del MENSAJE original produce tinie-
blas, muerte y el infierno. Durante las edades de la Iglesia Cristiana Dios
se ha manifestado maravillosamente en los diversos ministerios de sier-
vos fieles al original. En estos días finales de la historia del mundo una
vez más Dios se ha manifestado sin lugar a duda en el ministerio poderoso
de Su siervo, William Marrion Branham. Aunque Dios lo recogió en el
año 1965, sus palabras claras siguen vigentes hoy en muchos idiomas
y en todo el mundo. El MENSAJE sigue siendo el mismo: Dios es luz.
Cualquier persona que desea caminar en la Luz de Dios, esa persona es
una reflexión del MENSAJE.