Reseña

El insomne es, aparte de un juego metaficcional, el bosquejo de un hombre complejo, sensible, contrariado y, sobre todo, asustado de sí mismo y de sus falencias. Una mujer viuda no puede dejar de repensar a su esposo, como si una de las serpientes del Caduceo hubiese muerto y fuese responsabilidad de la restante recrear esa ausencia; una mujer de carácter opuesto al de su difunto marido, pero desde esa oposición lo busca, lo lee, lo entiende, lo redescubre en ella misma.
La novela viaja a través del duelo y expresa en oraciones como «El cielo se voltea sobre la tierra y hace un inmenso hueco entre el espacio; entre la gente» esa llegada a casa después del entierro de un ser amado, una sensación que la mayoría hemos sentido alguna tarde taciturna de domingo.