Reseña

En un rincón escondido en los pliegues del planeta, donde las leyes de la naturaleza cedían ante lo extraordinario, existía una ciudad sumida en una oscuridad que parecía eterna. En este lugar, las sombras no solo eran ausencia de luz; eran puertas abiertas a horrores del abismo. Monstruos de las tinieblas emergían desde lo profundo para atormentar, destruir y consumir a sus indefensos habitantes. El rey de aquella ciudad, desesperado ante la desolación, encontró esperanza en una antigua profecía que estaba tallada en una piedra. Según los antiguos escritos, un día llegaría una chispa divina, una estrella sagrada, capaz de traer la luz necesaria para salvarlos de la oscuridad y de los monstruos. Mientras estaba en ese lugar, se le aparecieron unos peculiares magos y le brindaron palabras de esperanza. Pero al tiempo se le otorgó una misión: construir un edificio en forma de antorcha en el centro de la ciudad, el lugar prometido donde la luz sagrada habría de posarse.
Y así fue. La estrella de Belén descendió, iluminó la ciudad y alejó a las criaturas del abismo. Desde entonces, la antorcha se convirtió en un símbolo sagrado, el hogar de una luz celestial que protegía a la ciudad y devolvía la vida a sus habitantes.
Pero con el paso de las generaciones, los descendientes de aquel rey olvidaron la historia de la luz y de la antorcha. Su significado se perdió, y con la indiferencia llegó la tragedia. Una noche, la luz sagrada fue robada, y sumió de nuevo a la ciudad en su oscuridad maldita. Ahora, tres jóvenes príncipes, herederos de la corona, se ven obligados a emprender una misión titánica: recuperar la luz sagrada. Su viaje los llevará más allá de las fronteras de lo conocido, a través del bosque de tinieblas y hasta el abismo mismo, tendrán que enfrentar a los líderes de la oscuridad, para restaurar lo que alguna vez se les había concedido y devolver la esperanza a su pueblo.