Reseña

Hace mucho, muchísimo tiempo vivió en el
Barrio Getsemaní, un señor de nombre
Gilberto, que popularmente lo conocían con
el apodo de “El Salaito”, remoquete que le
colocaron por tantas cosas negativas que le
sucedían frecuentemente.
El personaje de “El Salaito” era un hombre
que no tenía ni mujer, ni hijos, solo dos
parientes o familiares, que eran su madre y
una hermana.

Cuando sucedieron los hechos que les voy a
narrar, él tenía aproximadamente 30 años
de edad.

“El Salaito”, buscaba trabajo, pero no lo
encontraba por ninguna parte y cuando lo
encontraba era del año un día y de tipo
temporal, o sea, trabajo de pocos días; lo
que motivó a sus amigos a bautizarlo con el
apodo de “El Salaito”.