Reseña

Dejar ir, no es sinónimo de dejar de amar, en ocasiones, soltar al otro es un acto de amor, uno que permite encarar nuevos caminos, nuevas formas. Es por esto que, al leer los poemas de Susana Hernández, se encuentra dibujado el “amar sin condición”, sin las ataduras del cuerpo o el deseo. Susana entiende el vivir, como acto sagrado del amor, expresado en instantes y perpetuado en la poesía.
La alegría del amor no termina cuando este se transforma, sigue su camino en la memoria, a través de las sonrisas que llegan de repente con el recuerdo de un bello instante o al convertirlo en versos, esos que dejan instantes perpetuos inscritos en el corazón de quien en verdad amó.