Me perdono
Autor: | Simbaqueba Morales, Ángela Victoria |
Este es un momento de prueba extrema donde los argumentos pierden valor, aquí no hay lugar a la justificación, de nada sirve buscar culpables, o señalar el error de alguien más. Este es la prueba de oro de un hijo de Dios.
Aquí es donde las respuestas a nuestras preguntas no nos agradarían, ejemplifiquemos: ¿Por qué me paso esto? ¿Por qué a mí? ¿Por qué recibo esto, si solo quería ayudar? Así se puede ir por la vida buscando responsables. Ya sabemos que algo no funcionó entonces no busquemos argumentos para esquivar la responsabilidad.
Lo sencillo seria reconocer la equivocación de inmediato y decir ME PERDONO por la parte del error que me corresponde, pero en nuestra humanidad lo sencillo muchas veces lo hacemos complejo, es así como en algunas ocasiones se prefiere dar rienda suelta al conflicto, pues siempre se guarda la esperanza de tener toda la razón.
Sin exagerar o menguar la importancia de cada realidad, abrázate al amor de Dios, él no busca culpables él busca un corazón dispuesto que viva su Amor, él es el Amor de los amores en quien se puede confiar, si es el caso reconcíliate con él a través de Cristo quien consumo todo en la cruz.