Reseña

Poemas para aliviar el alma, es el resultado de las experiencias y vivencias en diferentes momentos de mi vida, tanto a nivel profesional como personal. Me pareció oportuno en esta etapa de mi existir, recopilar todo eso que he escrito en estos últimos años, cuando me siento una mujer que ha crecido humanamente, madurado y profesionalmente más sabia, pero con ganas de seguir inspirándome a diario en los acontecimientos de la vida, sin perder la sensibilidad a lo bello, a lo cotidiano y al sufrimiento del alma.
Desde niña me ha gustado escribir, convertir mis sentimientos en lo que considero es poesía y siempre en algún escrito, surge una letra producto del sentimiento. Así ha pasado durante toda mi vida, antes llevaba un diario, con los cambios y mudanzas se perdió, había escrito bastante; pero en este momento con todas las experiencias de mis años vuelvo a escribir con amor y pasión.
Estudie Psicología por vocación, por esa necesidad que tenía de ayudar a los demás, de comprender al otro, de mostrarle que si existen salidas para las dificultades. En algunos momentos cuando estudiaba sobres las teorías bases de la psicología, me preguntaba si en verdad existía un Dios; a pesar de ser un mujer criada con profunda fe espiritual, dudada; sin embargo, siempre sucedía algo en mí, que me confrontaba con ese ser supremo llamado Dios y hoy puedo decir soy un testimonio de su gran amor. Por eso no lo puedo dejar de lado en estos escritos, porque en mi caso es una fuerza que me alienta a seguir, respetando siempre las creencias y la espiritualidad de los demás.
El campo de la Psicología, llevo ejerciéndolo con gran respeto desde hace muchísimo tiempo, me ha dado valiosos aprendizajes para conocer al otro e ir puliendo esa empatía que tanto se necesita en esta profesión, no es fácil ayudar a los demás a encontrarse, a sanarse y seguir teniendo ganas de vivir.
Hoy me dedico a la Psicología clínica y acompaño a diferentes personas en sus procesos de sanidad mental y emocional, lo que sigue despertando esa profunda sensibilidad por el rescate del ser y quizás una manera que encontré de plasmar de forma delicada y cuidada su sentir fue a través de estas bonitas letras.
No soy escritora profesional, he intentado realizar algunos escritos más desde las teorías psicológicas, pero en estas líneas están plasmadas mis experiencias como ser humano sintiente que necesita expresar que somos piel y un ejercicio sano es la escritura de esos sentimientos para también ayudar a ese otro a encontrarse un poco.
El libro está divido en dos capítulos. El primero contiene los poemas que desde la práctica clínica me han inspirado, con base en algunos motivos de consulta y lo que se ha generado durante el acompañamiento psicológico.

En este apartado, al final de los poemas que abordan una misma temática, realizó un comentario, a manera de psicoeducación de algunas dificultades mentales y emocionales que se mencionan en el mismo escrito.
En el segundo capítulo están los poemas que sustentan las experiencias personales, porque también somos seres sociales, una totalidad que nos hace personas y las áreas deben estar conectadas para poder funcionar como un ser que se relaciona con los demás.
Es un factor protector para la salud mental de una persona contar con redes de apoyo como la familia, los amigos, los grupos religiosos, entre otras comunidades que protegen, alientan y empujan para tener bienestar emocional.
Estas páginas además pueden considerarse como un intento de ayudar a quienes identifiquen alguna dificultad emocional, lo puedan asimilar para ir tomando conciencia y busquen ayuda profesional, porque siempre habrá esperanza; sí existen salidas para aliviar los dolores del alma, en diferentes circunstancias del existir.