La disputa del sentido común y la transformación del orden social. Los aportes de Antonio Gramsci
Autor: | Pachón Soto, Damián |
¿A qué se debe la actualidad de Gramsci? A su renacer en el marco de los procesos políticos contemporáneos en Europa y en América Latina, y a la vigencia de un arsenal de conceptos útiles para la práctica política: hegemonía, ideología, sentido común, bloque histórico, crisis orgánica, interregno, intelectual orgánico, entre otros. Esta es la razón por la cual Gramsci vuelve a estar vigente.
En efecto, como lo recuerda Íñigo Errejón –uno de los fundadores del partido Podemos en España–, el filósofo italiano pemitió ver que es posible la actividad política entendida como una lucha por el sentido y como articulación de una suma compleja y “contradictoria de iniciativas culturales, sociales y electorales-institucionales que van cambiando los equilibrios de fuerzas en favor de los gobernados”. Es decir, evidenció la posibilidad de construir voluntad común colectiva y articular al pueblo en defensa de la democracia y en claro reto a las oligarquías y sus privilegios.
Por otro lado, hoy es más claro que nunca que hay que disputar el sentido político de la realidad por medio de la batalla cultural, conquistando así el sentido común para construir contrahegemonías que lleven a un mundo distinto. De lo contrario, el fascismo oligárquico, identitario, inmunitario y excluyente, se terminará imponiendo. En esta tarea emancipadora el pensamiento de Gramsci continúa siendo una caja de herramientas imprescindible.