Reseña

El presente trabajo procura hacer un aporte a la reflexión respecto de los elementos, particularidades, problemas y dificultades que plantea en la actualidad la responsabilidad por daños, tanto en materia civil, como estatal. En ese propósito pretende dar una respuesta general al interrogante respecto a qué es lo que verdaderamente permite radicar en un sujeto de derecho los daños padecidos por otro, si lo causal, si lo normativo, ello por cuanto tradicionalmente la dogmática de la responsabilidad extracontractual ha justificado la radicación de resultados dañosos en vínculos naturales que se constatan empíricamente, como lo es el nexo causal entre la conducta del responsable y el daño, o lo que es lo mismo, hacer responder del daño a quien lo ha causado.
Pero encontramos que desde los códigos civiles decimonónicos se ha venido estableciendo la responsabilidad sin aporte causal del responsable, como son todos los eventos de responsabilidad por el hecho de otro, como la del padre con respecto a sus hijos menores de edad, la responsabilidad de los tutores y curadores respecto de sus pupilos, la responsabilidad de los directores de escuela respecto de los daños ocasionados por sus estudiantes, y la responsabilidad de los empleadores respecto de los daños causados por sus empleados con ocasión de su trabajo, eventos todos en los que se hace responsable del daño a una persona que no lo ha causado.
Del mismo modo, encontramos que en responsabilidad extracontractual del Estado hay varios eventos en que se declara la responsabilidad sin que el daño sea causado por agentes del Estado, como es el caso de la responsabilidad por actos de terrorismo, responsabilidad por muerte de reclusos en las cárceles a manos de otros reclusos, responsabilidad por desplazamiento forzado, responsabilidad por falta de protección o seguridad, responsabilidad por falta de vigilancia y control, y en general,
en todos los casos de omisión.