Reseña

María Ramos nació en Guadalcanal- España en 1550. De su historia se sabe muy poco y su nombre no es hasta ahora reconocido mundialmente junto a la advocación de la Virgen de Chiquinquirá, como sí lo son San Juan Diego, junto a la Virgen de Guadalupe, o Bernadette Soubirous, junto a la Virgen de Lourdes o los tres pastorcitos: Lucia, Jacinta y Francisco junto a la Virgen de Fátima. La vida de María Ramos quedó iluminada por el portentoso milagro ocurrido el 26 de diciembre de 1586 en Chiquinquirá - Colombia. Era ella, quien se encontraba rezando ante un lienzo roto y descolorido, donde no se lograba ver nada, pero le habían dicho que allí había sido pintada la Virgen, junto con San Andrés y San Antonio de Padua. Al terminar su oración, se disponía a salir de la capilla cuando el lienzo se bajó de donde estaba colgado, se llenó de luz y de él salieron nuevamente las imágenes originalmente pintadas. Este milagro fue investigado y reconocido por la Iglesia Católica de la época. Sin embargo, poco se sabe de la vida de María Ramos, pero se presume que perteneció a una familia de fe, muy devota de la Virgen, y que desde niña tuvo la sencillez suficiente para sostener una fe prodigiosa que le permitiera vivir en un mundo hostil a la feminidad. Su vida le pertenece al anonimato del siglo XVI, pero este primer libro ha sido escrito para rescatar su historia personal de niña y dilucidar por qué frente a ella se reveló la Virgen.