Porque la cultura importa: Políticas culturales en una polifonía de voces
Autores: | Gómez Londoño, Ana María Bustos Gómez, Marta Lucía Garzón Martínez, María Teresa |
Importa porque nos explica la vida, nuestras realidades, dando sustento tanto a proyectos hegemónicos de dominación como a historias locales de transformación de los sistemas de poder en tanto se le puede definir —siempre de manera provisoria, aunque estratégica— como ese: “repertorio de símbolos y signos que son constitutivos, en su faceta discursiva, de la realidad, [dando] cuenta de lo que la gente piensa, siente, desea e imagina” (Garzón, 2018, p. 86). Definición política, sin lugar a duda, que invita a retornar al análisis de la vida cotidiana con relación a sus diversas configuraciones de poder, y en particular, a preguntar cómo se escriben historias colectivas, cuya única función es esperanzar, con el objetivo de diseñar políticas culturales que nos permitan sobrevivir en este mundo vivido como humano (Gutiérrez, 2017; Grossberg, 2009). Y mucho más en este momento actual de duelos infinitos luego de la crisis sanitaria del SARS-CoV-2, la cual ha costado miles de vidas y que implica renovadas búsquedas de sentido o, por lo menos, la promesa de morir peleando. En ese sentido, la afirmación que da título a este libro que presentamos a ustedes, con emoción y humildad, es una respuesta certera a secas: ¿Por qué la cultura importa? Porque la cultura importa. Respuesta certera sí, aunque engañosa pues se presenta en apariencia como singular, aunque en realidad es plural puesto que aquí se piensa la política cultural desde una polifonía de voces femeninas, experiencias reflexivas, lugares de enunciación, coordenadas geopolíticas y géneros musicales que un día se encontraron para seguir reflexionando a propósito de la relación entre cultura y política.