Reseña

Se comparte una sensibilidad y vivencia como palabra a manera de la ciencia, su método y su filosofía, historicidad genealógica ancestral con trayectoria itinerante de décadas y linajes, sólo que en el aprendizaje integrativo trascendente sin arrogancia canónica y cristalizada de lo dado, del pensar teórico determinado, entonces, un caminar de la tierra como método de sentires, experiencias y vivencias del natural transpensar epistémico preconceptual y co-razonante en despliegues y potencias del pensar bonito con corazón dulce como valor filosófico de una metódica de desaprendizaje, un método de la tierra como posición transmoderna del negativo y del positivo, lugar del vacio y la falta, del silencio, de la ausencia, de la sombra, de los nadie, de los indios,

Entonces, un metalógico aprender a pensar pensándose y aprender a sentir sintiéndose para el retorno a la consciencia de nuestro origen en el sentido esencial y existencial de lo propio. Una consciencia ancestral de complejidad y autonomía gradual y creciente, nativa indígena de cosmogonía, ontología, epistemología y metodología para la comprensión de lo humano y transhumano en la vida, de lo telúrico y cósmico del núcleo de ser, del retorno para sí en mismidad.

Una trama en debate como tejido de las huellas y caminos, investigaciones y métodos, cuyo sentido propósito es el de puentear integralmente los fraccionamientos antropodualistas de la metodología y ubicar el anhelo urgente de conocimiento en una apuesta de método en cuya andanza cotidiana se devela el panorama científico del interés trascendental, pluralista y contemplativo de las sabidurías ancestrales y sus potencias y conciencias del desaprender transformador en el mundo de la vida telúrica y de la tierra vital que nos compone.

La recuperación como camino de una palabra propia y creativa sin los sesgos coloniales de positividad o decoloniales de negatividad, de las tendencias modernas y postmodernas de los prefijos racionalistas y occidentales vergonzantes coloniales del des, de, post, entre otros, sino de la coherencia de la fuerza epistémica de la escucha de la tierra como intuición y andanza de prácticas míticas y ritualísticas de certeza y saber para el mundo, un método o tejido de métodos científicos ancestrales para la argumentación académica, psicosocial y comunal de cómo conocer y transformar la vida con valor y validez científica ancestral desde lo propio.

Un método trascendental perenne, compréndase entonces profundamente arraigado en la historia y sus existencias, en la esencia y sus raíces… milenario, mítico, originario y espiritual, un caminar al origen como camino de la co-razón, un método de pensar y sentir el mundo de la vida como mundo de la tierra, de pensar como lo hace el abuelo asentado en su lugar de poder, en su banca frente al fuego para ver pasar el universo y danzar en la epifanía de sus enigmas.