Reseña

Prólogo
Acercarse a la obra de un artista es adentrarse en mundos distintos lle nos de formas y colores diferentes. Acercarse a la obra de un artista es amar u odiar su trabajo, la experiencia siempre es distinta y está sujeta a diversos factores. Podemos amar las creaciones de Dalí u odiarlas, lo mismo pasa con Degas, Van Gogh, Ressendi o cualquier otro que se nos ocurra. Todos ellos son personajes tan alejados de nuestra realidad que solo nos podemos comunicar con ellos a través de su obra. ¿Pero qué pasa cuando el artista es tu papá? Desde pequeña me he visto rodeada por las creaciones de mi padre. He sido testigo de sus ocurrencias y la forma en la cual cobran vida a través de sus manos. Ha sido toda una experiencia donde las plantas, como fuente de inspiración, siempre nos han acompañado. Y no solo en las pinturas, sino por todos los rincones de los lugares en los cuales hemos vivido. Mi padre ha transforma- do cada espacio y momento de su vida en una búsqueda por entender la naturaleza a través del arte. Y yo, como su hija, no he sido ajena a ello.
Diversos son los temas que busca constantemente plasmar en sus obras. Si pudiera referirme a algunos de ellos diría, sin dudarlo, que son las plantas y la experiencia de los sentidos a través del contacto con los enteógenos. La vida de artista de mi padre ha girado alrededor de estos temas, innega- blemente su conocimiento sobre dichos asuntos es amplio, pero lo que más lo caracteriza es ese deseo por seguir aprendiendo y descubriendo día tras días lo que le interesa. Estos intereses no solamente los ha llevado al campo artístico, que es el más importante para él, sino que también ha intentado forjar diversas experiencias desde la convivencia misma con las plantas: sembrar, cultivar y cosechar el fruto de una tierra que él mismo ha trabajado.
Hugo no solo es un gran artista, es además un gran papá. “Es tan fuerte como un gorila, feliz como un hipopótamo, es sabio como un búho y chi ado como un cepillo”, Dice Anthony Browne en su libro Mi papá y aunque este sea solo un libro para niños, me recuerda a las largas horas de lectura que mi papá y yo teníamos cuando íbamos a la biblioteca. Por esta razón, no puedo apreciar su obra artística sin recordar constantemente a mi padre y quizá esto me impida un acercamiento objetivo a la lectura que hago de la misma.
Este libro titulado Curador es pues, una parte de su vida, que resume sus experiencias y saberes, pero que nunca terminará de contar toda su historia.