Reseña

Cortés, Gil, Pablo Enrique. Vientos de Ranchería, historia de la familia Cortés Gil y descendientes. Bogotá: Capote Azul ediciones, 120 páginas.

El libro “Vientos de Ranchería, historia de la familia Cortés Gil y descendientes”, de Pablo Enrique Cortés Gil, es un relato genealógico con tintes autobiográficos que se convierte en una verdadera crónica familiar por la descripción de factores geográficos, culturales ideológicos, religiosos y aún socio-económicos, que han cohesionado o desmembrado a la familia como núcleo social importante y ayudan a comprender la idiosincracia de sus gentes y su región.

A través este relato, el lector podrá entrever no solo a los ascendientes de la referida familia cuyos orígenes se encuentran la lejana vereda de Ranchería, sino que por medio de una exposición que no descarta la inclusión de elementos ficcionales pero verosímiles, se nos muestran la vida de toda una región con sus recursos naturales, el carácter de sus gentes, los oficios más característicos, sus habilidades manuales y técnicas, sus vocaciones, sus costumbres, etc., dentro de un registro emocional que incluye la creación de símbolos (escudo, bandera e himno), y la dedicación de poemas a los progenitores, así como la exposición de álbumes y fotos familiares.

Así, es posible reconocerse en situaciones del pasado, del presente y del futuro, en actividades como la minería, que han representado progreso económico para la región y el país por su especial calidad, pero que siempre ha lucrado a pocas familias o empresas que se valen de la fuerza de trabajo de sus gentes en condiciones deplorables y con consecuencias letales para el medio ambiente. Por esto, esta historia familia tiene igualmente tintes de crítica social, que dentro del transcurso de sus vidas dentro de una línea de tiempo, destaca factores positivos y negativos en su trayectoria.

Es una historia que bien podría ser la de cualquiera de las regiones de Cundinamarca o del país, donde las escasas oportunidades hacen que las familias se rebusquen el sustento de diversas maneras, o decidan emigrar a otras regiones. Pero, cuando el deseo de salir adelante se impone, como es el caso de esta familia, se lograban sobreponer ante las vicisitudes y dificultades para salir adelante, llegando incluso a fundar la primera escuela de Ranchería ¬–siendo la familia Cortés Gil una de sus principales gestores– para darle un rumbo mejor a sus propios destinos.

Finalmente, este libro resulta ser un homenaje al género genealógico, que con el tiempo se ha ido perdiendo visibilidad, pero constituye una especial forma de autoconocimiento y de proyección social, que da explicación a la forma de ser de quienes conforman un árbol genealógico, resaltando aspectos que los identifican pero que también los diferencian debido a factores genéticos pero también culturales.
Nelly Rocío Amaya, editora.