Reseña

Desde que las armas se crearon han ocupado un lugar en la vida del ser humano, las de fuego, las de cuerda, las de viento, madera, acero, cobre, hierro, piedra, hueso; las de "un brazo" de fuerza, las de millones de kilotones de poder, todas han estado ahí, en algún momento de la historia del hombre, le han permitido llegar a ser lo que es hoy.
No siempre su historia ha sido la más bonita, como bien se sabe, incontables vidas humanas se han perdido por su acción, amigos y enemigos por igual, cada una de ellas es el precio pagado por emplearlas, para el bien o para mal. A veces, simplemente se trata de la responsabilidad de llevarlas y nunca usarlas.
En cada arma se ve reflejado el ingenio del ser humano, que evolucionó también en las maneras de matar a sus iguales, es cierto, pero nadie puede negar que su capacidad inventiva, técnica, el conocimiento e inteligencia están en el acero, en la madera, en el polímero, en cada una de sus formas y colores, conocimiento al fin y al cabo.
En estas páginas el lector verá la evolución de algunas armas que reposan en la colección de piezas del Museo Militar de Colombia, lo mejor de todo es que podrá apreciarlas en vivo y en directo en algún momento de su vida, detrás de un cristal, descansando de su agitada vida, para que las conozca, las aprecie y vea en cada una de ellas el conocimiento y el arte que encierran, todo tan cerca, todo en nuestro Museo Militar.
"Las armas son muy bellas, lo malo es lo que hacemos con ellas"