Reseña

Al estudiar con detenimiento la ‘Carta a los Hebreos’, no deja de llamar la atención que en el capítulo seis, hay un enunciado que a la letra dice así: “de la doctrina de los bautismos” (Hebreos 6:2). El postulado acerca de la doctrina aparece en singular, por supuesto, porque en sí misma es una sola doctrina, pero, ‘bautismos’ está en plural, dando a entender que no se trata de un solo bautismo sino de varios.
Desde la perspectiva de esta verdad, la presente obra sondea en las Sagradas Escrituras para poner al alcance de los creyentes todo lo que concierne a los diferentes bautismos que se mencionan en ellas, considerando que cada uno de estos cumplen funciones específicas para el provecho de los hijos de Dios.
En este orden, ha de considerarse esta doctrina a partir del bautismo en el que fue inmerso el pueblo de Israel; para luego comprender el bautismo de Juan y sus implicaciones para quienes lo tomaron; cómo este bautismo lleva al Señor Jesús; el propio bautismo del Señor Jesucristo y cuáles son su valor y su objetivo; enseguida seremos guiados al bautismo del creyente, o su bautismo en agua; para que posteriormente consideremos su incorporación al Cuerpo de Cristo o Iglesia. Finalmente se ha de concluir en el bautismo con el Espíritu Santo con todo lo que él significa para la experiencia práctica de los creyentes como testigos de Cristo actuando en el poder del Espíritu Santo como colaboradores o instrumentos suyos a fin de cumplir el cometido de llevar el Evangelio hasta lo último de la tierra.