Análisis estratégico y prospectivo 2020-2030
Autores: | Suarez Monsalve, Doris Eugenia Cruz Meza, Diana Ximena Cala Parra, Oscar Mauricio Castillo Calderon, Juan Manuel |
El deterioro de múltiples aspectos de las perspectivas económicas mundiales puede complicar la consecución de los objetivos de desarrollo para lograr los ambiciosos objetivos de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, la economía mundial tiene que ser
dinámica e inclusiva. En medio de prolongadas disputas comerciales y de una gran incertidumbre política, en el último año diversos aspectos de la economía mundial se han deteriorado considerablemente, lo cual podría obrar en contra de los esfuerzos por reducir la pobreza, crear empleos decentes, ampliar el acceso a la energía asequible y limpia y
alcanzar muchos otros Objetivos de Desarrollo Sostenible. El crecimiento del producto
mundial bruto se redujo al 2,3 % en 2019, el nivel más bajo desde la crisis financiera mundial de 2008-2009. Esta desaceleración se produce al tiempo que se acentúa el descontento con la calidad del crecimiento económico desde el punto de vista social y ambiental, en un
contexto de desigualdades generalizadas y una crisis climática creciente. Aunque las tensiones comerciales mundiales están disminuyendo en algunos frentes, el riesgo de recaída es alto, puesto que estas disputas responden a problemas importantes que todavía no se han abordado con detenimiento. Siempre que algunos posibles reveses no lleguen a
producirse, para 2020 se prevé un modesto aumento del crecimiento mundial, que se cifraría en el 2,5 % (ver Figura 1), aunque la incertidumbre en materia de políticas seguirá afectando los planes de inversión (Naciones Unidas, 2020)