Reseña

Un género de narrativa poco usual. El canto a un país en un elixir de cifras sobre sus excelsas oportunidades y la quimera de un mejor futuro. En la voz de Antonio Machado “Después de la verdad nada hay tan bello como la ficción”.
El desempleo, no siempre es el producto de un fenómeno económico y financiero, puede ser el resultado de la estrechez de miras y de salidas. El no darse cuenta de que los pedruscos que nos hieren los pies a veces son escalones. Es la historia que ha dado origen a la incursión de este soñador en la política: ver tanta gente sin destino, a pesar de deambular sobre hectáreas de tesoros.
Una obra útil y pertinente en la coyuntura social y política de Colombia.