Reseña

Estas palabras están dedicadas a los hombres y mujeres de los pueblos, caseríos y ciudades del país, que traspasan los tiempos del luto y la historia del desarraigo. Son los menos, los invisibles, los anónimos, que liberan sus relatos de las mordazas del silencio y viajan desde las heridas a la esperanza, realzando la memoria frente al olvido y la indiferencia. Son miradas, postales, cantos, voces y palabras, que despliegan las banderas de la dignidad y de la vida, por los que no alcanzaron un mañana y cayeron bajo los espirales de la violencia, que en forma de borrascas cruza por los tiempos en campos y ciudades.