Reseña

Bienvenidos y bienvenidas a esta caja de música. Al abrirla se darán
cuenta que está llena de movimientos y ritmos con un propósito:
disfrutar y valorar las notas que la diversidad le pone a nuestras vidas.
Desde la línea de formación educativa de Proantioquia estamos
convencidos de la necesidad de pasar de respetar la diferencia
a promover la diversidad, y esta es nuestra apuesta para poner
en escena una serie de temas que, aunque impliquen movilizar
pensamientos y creencias, son fundamentales para que la
escuela cumpla con su condición de espacio para lo universal.
Esta propuesta inicia con lo que hemos llamado nuestra partitura.
Allí, la profesora e investigadora Hilda Mar Rodríguez nos plantea
un acercamiento a por qué las escuelas deben considerar la
diversidad como una dimensión fundamental de su labor educadora.
Continuamos con tres capítulos que, a manera de movimientos
como en una sinfonía, buscan plantear tres perspectivas de la
diversidad, aplicables tanto a la sociedad en general como a la
escuela en particular: las comunidades vulnerables, el género
en sentido amplio y la discapacidad. Cada capítulo será una
ocasión para plantear algunas ideas en las que creemos, para
problematizar otras, pero sobre todo para evidenciar que las
reflexiones en estos campos no son sólo necesarios sino urgentes.
Cada uno de los anteriores movimientos se complementa con
un interludio. En estos buscamos presentar algunos recursos,
para facilitar la incorporación de las reflexiones anteriores a
los espacios escolares en los que ustedes desarrollan su labor.
Finalmente compartimos una breve reflexión sobre el uso de
lenguajes alternativos como posibilidad, en sí misma, de promover
ambientes de aprendizaje incluyentes y participativos.
Confiamos, como siempre lo hacemos, en que este material
sea una excusa para seguir pensando, junto con ustedes,
algunas ideas que nos ayuden a resignificar y afianzar el
privilegiado papel de las escuelas, y de las maestras y los
maestros, como grandes constructores de ciudadanía.