Los nuevos escenarios para la educación, teletrabajo, emprendimiento y la medicina
El vertiginoso desarrollo del conocimiento ha llevado al hombre a desagregarlo a través de la ciencia, las artes, la técnica y la tecnología. Cada campo del conocimiento se ramifica en especializaciones lo cual ha permitido que evolucionen nuevas y muchas profesiones en el mundo. Esto ha colocado a los usuarios del conocimiento (estudiantes, profesores, investigadores, comerciantes, industriales, banqueros, etc.) en dificultades para localizar y acezar los nichos que la sociedad de la información ha conformado. Por un lado, la información existente sobre un conocimiento específico se presenta en forma masiva, por el otro requieren buscar sólo la concerniente a su especialidad y finalmente en el momento de obtenerla se encuentran ante el inconveniente de no poseer el documento que les fue referenciado por limitaciones impuestas por los países desarrollados, quienes sólo disponen el 5% de la información competitiva (OCDE), en los medios actuales, como lo son la autopista de la información y los pocos reservorios de información de libre acceso que existen, que con la comunicación de la información son tres elementos sustanciales en la evolución del hombre y su entorno. Por tanto, es necesario disponer de estrategias para que la ciencia y la tecnología en su libre acceso, lleguen a los países dependientes a través de la gestión del conocimiento. Sólo así las tendencias mundiales del desarrollo técnico científico, de la formación y el aprendizaje, podrán también hacer nicho en el ámbito iberoamericano y del Caribe
Nicholas Carr en su disertación magistral de “Transformando País en la Era Digital”; de la Universidad del Rosario de Bogotá (2019) afirmaba que “esta era digital trae consigo la analítica de datos, la inteligencia artificial, y otras tecnologías tales como “blockchain”, las cuales generan oportunidades tanto para nosotros como individuos, así como para el país. Resulta de vital importancia reflexionar sobre cómo podemos comprender y aprovechar estas oportunidades propias de la Revolución 4.0, sobre todo, en términos de emprendimiento, inclusión y responsabilidad social, y educación. Aparecen, además, desafíos como la seguridad digital, la inserción de la ética en los escenarios TIC y la evolución regulatoria, entre otros”. No obstante, hizo especial énfasis en que “estas tecnologías invitan a buscar, pero no a reflexionar”, un elemento que asegura el factor humano en los nuevos escenarios generados por la sociedad de la información.
Finalmente, es necesario disponer de un espacio propicio para conocer más sobre la forma para aprender y educar en ambientes soportados por las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, como también para formar con eficiencia a los futuros profesionales innovadores y creativos para que sean líderes, dinamizadores, facilitadores, expertos, funcionarios emprendedores etc., en el “ser competente” para asumir los roles propios que exige el nuevo arquetipo de sociedad que vivimos y su desarrollo sostenible.
Por lo anterior, el propósito del CITICI2020 es conocer experiencias significativas y buenas prácticas en la formación y gestión del talento humano, dentro de un ámbito que permita aplicar con rostro humano el desarrollo científico-tecnológico con nuevos enfoques pedagógicos, así como con estrategias didácticas, mediante los nuevos escenarios educativos, para una mayor inclusión social y cobertura educativa en Iberoamérica y el Caribe.