Didáctica de empresas simuladas en la educación media técnica
Relatos de experiencias significativas
En el transcurrir de la vida muchos son los retos que se nos colocan al frente. Cambiar los paradigmas humanos no es tarea fácil; solo los más atrevidos se embarcan en la difícil labor de abrir otros
caminos a las nuevas generaciones rompiendo los moldes inculcados desde temprana edad. «No se le una famosa frase repetida por nuestros abuelos, padres y hasta profesores.
Sin embargo, creemos que sí se le pueden pedir peras al olmo.
Entendamos que la sentencia se nos convierte en un limitante mental. El olmo no da peras, solo
frutos secos con una semilla oval aplastada no comestible, mientras que la pera viene del peral y su fruto es
dulce y refrescante. En lo único que concordamos con el paradigma es al interpretar que no podemos producir frutos diferentes cuando lo que tradicionalmente hacemos sigue siendo lo mismo.
Basados en las muchas intenciones que hemos escuchado, leído y visto en diferentes conferencias, libros y documentales, es claro que en el tema educativo requiere un cambio total de la metodología que se
utiliza para formar a los adolescentes, pero no conocíamos, hasta ingresar a trabajar en el SENA, concretamente en el Centro de Comercio y Servicios de la regional Risaralda, una entidad de formación
que verdaderamente tuviese la intención estructural de cambiar la forma tradicional de formar a los jóvenes hacia una nueva manera de impartir el conocimiento, una institución que verdaderamente contara con una intención desde su estructura de educar personas más preparadas y competentes que salieran al mundo con
una mentalidad crítica, con capacidad de liderazgo e innovación que permitiera al empresario emplearlas.
Un ejemplo de lo fértil de este terreno para crecer con una propuesta es la suerte de la semilla que a continuación se relata.