Reseña

Torbellinos invisibles: danzas de Chinavita, es el resultado de una investigación etnográfica realizada por la investigadora Angela Gámez, en el municipio de Chinavita, desde el año 2008, empezando con un estudio inicial llamado “Hacia la recuperación del Torbellino”. Con el acompañamiento de su padre, durante esos primeros años, la investigadora buscó la voz de los abuelos campesinos de Chinavita, a través de entrevistas semi-estructuradas aplicadas a descendientes de familias campesinas que se caracterizaron por su interés y práctica de la danza desde hace más de un siglo, lo que permitió una percepción y análisis en tiempo real, así como también posteriores y a la distancia. De allí surgió la interpretación de testimonios, que fueron transcritos al lenguaje dancístico, en siete coreografías a ritmo de Torbellino, llamadas: EL TRES DE CHINAVITA (Ganachicha), EL RASCAJUCHAS, EL SOMBRERO, LAS PERDICES DE CHINAVITA, EL SECRETO, LAS CINTAS y EL PASAMANOS.
Al obtener el premio de la carpeta de Estímulos 2018 – Programa Departamental de Concertación Cultural, en la línea: Procesos de fortalecimiento cultural y promoción del patrimonio y la memoria cultural, con el proyecto LA DANZA PATRIMONIO Y MEMORIA DE CHINAVITA, el cual permitió la cofinanciación para la publicación del presente libro, se la investigadora decidió involucrar tres danzas nacidas en fechas posteriores a 1991. Estas danzas son LOS ANIMALES, LOS ARCOS DE CHINAVITA y LOS SILLETEROS, que si bien no eran bailadas por nuestros campesinos de antaño, sí fueron investigaciones hechas en Chinavita y creaciones inspiradas en las costumbres de este municipio, bailadas además, por sujetos contemporáneos en la zona urbana del mismo, y aún hoy se mantienen en la memoria de sus habitantes.

Este libro compila diez (10) danzas propias del municipio de Chinavita que re-crean su cultura tradicional, proponiendo la interacción de la población contemporánea con el patrimonio inmaterial de su propio pueblo y generando participación directa de su comunidad, tanto rural como urbana. Es una de las diferentes posibilidades para entrar en diálogo con otras épocas, proyectando a la danza como elemento de conocimiento y reconocimiento de lo que sucedió en el pasado de la comunidad chinavitense, potenciando el interés hacia las tradiciones y la investigación de elementos culturales, reconociendo que en Chinavita existen, habitan y sobreviven muchos tesoros artísticos y culturales con los cuales es posible interactuar.