Reseña

CARTOGRAFIA DE LA DESAPARICIÓN FORZADA EN COLOMBIA

Mapear, cartografiar es como tomar distancia para poder ver lo estructural. El fenómeno de la desaparición forzada en Colombia es tan doloroso y brutal que, a veces, cuesta separarse del nombre, del rostro, de la vida difuminada por los victimarios. Pero es necesario.
La desaparición forzada ha sido, quizá, el crimen de lesa humanidad más invisibilizado en el país. Triste record en un país donde la violencia genera capas de negación que provocan una revictimización en escala que parece imparable. La negación del delito en sí, la falta de motivación política a la hora de esclarecerlo, los pocos medios de los que se dota a las entidades públicas creadas en el país, la narrativa que insiste de forma machacona en las ‘bondades’ del pasar página, del olvido… todo suma para que la desaparición forzada sea ‘víctima’ de un subregistro incalculable y que los familiares de las víctimas directas no ocupen un espacio central en las discusiones sobre cómo, cuándo y en qué forma superar el (los) conflicto (s) armado (s).