Reseña

Una madre encuentra a su pequeña hija adolescente colgada de una cuerda en su habitación. Esa mañana había presentido lo peor pero decidió salir, con sus dos pequeños hijos sin preguntar mucho. Marion era una niña como cualquier otra. Nora, una madre como cualquier otra. Ni la pequeña decía toda la verdad, ni la madre, culpabilizada por el suicidio terrible de su hija, conocía su vida digital, el acoso al que estaba siendo sometida y el desinterés de la mayoría de los colegios por sus estudiantes. Este es un grito de auxilio y una historia que merece ser leída por miles de personas que sufren. «Marion, hija mía, te suicidaste el 13 de febrero de 2013 a los 13 años. Bajo tu litera encontramos tu celular amarrado a un hilo, colgado para expresar simbólicamente que cortabas las palabras de quienes te torturaban en la escuela con insultos y amenazas. Escribo este libro para que todas las personas que lo lean extraigan lecciones de tu muerte; para que los padres eviten que sus hijos sean víctimas, como tú, o verdugos, como quienes te destruyeron. Escribo este libro con el fin de que nos tomemos en serio el acoso escolar».