Reseña

El libro presenta algunas reflexiones sobre el campo contemporáneo de la antropología visual, no en el sentido de definir y delimitar este campo,
sino que le apuesta a generar análisis, cuestionamientos y propuestas tanto teóricas como metodológicas que permitan repensar la relación entre la
antropología y lo visual. Desde la ¿crisis de la representación¿ de la década de 1990 en las ciencias sociales y la emergencia del ¿lo reflexivo¿ y ¿lo
subjetivo¿ en la investigación antropológica, la experiencia comienza a ser tenida en cuenta como base de la producción de conocimiento. Estas
aproximaciones han permitido que la relación entre la antropología y lo visual comience a tomar otros rumbos que implican desprenderse de la
imagen de ser solamente fuente de veracidad, soporte y anexo, para dirigirse hacia la epistemología de los sentidos y la imagen como forma de
producción de conocimiento y sentido, lo que implica trabajar lo visual desde el cuerpo, la percepción y la experiencia.

Así, en este libro presento un conjunto de reflexiones e investigaciones que he desarrollado en los últimos años y que han partido desde esta nueva
relación entre la antropología y lo visual. El estudio está dividido en dos secciones. La primera es una aproximación crítica a la relación entre
memoria, violencia e imagen, desde la descripción y el análisis de algunos trabajos que he realizado en los últimos años. A partir de mi experiencia
en la docencia y la investigación durante los años que he realizado cursos y proyectos de investigación-creación, presento en la segunda parte una
reflexión sobre la necesidad de acercarnos a la dimensión de la experiencia estética en la investigación antropológica, lo cual nos posibilita otras
formas de comprensión e interpretación de las realidades sociales a las que nos aproximamos.