Reseña

Los conocimientos tradicionales poseen una gran importancia en la actualidad, a partir de la manifestación que tienen como partes de la creación del intelecto humano y de su interacción con campos como la medicina, la industria, la biotecnología, entre otros; la utilización que tienen en el comercio les proporciona un valor significativo. Por esta razón, la demanda de protección jurídica efectiva de dichos conocimientos, desde el plano internacional, a través de un instrumento jurídico rector que brinde tutela universal, y del plano nacional, a partir de las legislaciones de cada país que los acoja, se convierte en un fuerte reclamo para mantenerlos vivos y para que las comunidades, como sus legítimos poseedores, puedan tener garantizados sus derechos. Crear un sistema jurídico de protección que se adapte a las peculiaridades de estos saberes, se presenta como una buena opción para lograr un manejo adecuado de ellos y el amparo que tanto necesitan.