Nuestro Padre San José
Autor: | Ruiseco Vieira, Carlos José |
Este libro, como otras publicaciones de Fundación Febiana, es fruto de un, trabajo lento y colectivo. De entre mis homilías y conferencias sobre la vida y misión de San José, escogimos algunas particularmente aptas para ser impresas y leídas; obedecen a diferentes ocasiones del calendario y a públicos bien diversos.
Al llegar a la etapa de edición tratamos de identificar lo más característico que englobara los temas tocados. No fue difícil darnos cuenta de que lo fundamental de José, el de Jesús, fue su paternidad. Padre del Hijo de Dios, Esposo de María y Padre de la Iglesia, De allí, surgió el título:
Nuestro Padre San José.
Y nos congratulamos con el título de Padre dado a José en la Biblia por nadie menos que María (Lucas 2, 48), misión que la Tradición de siglos ha ido elevando hasta invocarlo como protector de la Iglesia, vale decir Padre de la Iglesia universal.
Y, en verdad que, escudriñando cada uno de los diez escritos, subyace en el fondo ese invento del Padre Eterno, de encarnarse él también, en forma espiritual, en un selecto ser humano escogido desde la tarde de la Creación.
Presentamos a José en la agitada vida de Jesús Niño (escrito número 8) y con sus característicos sueños (6) que delatan las preocupaciones de un paterfamilias; por eso lo calificamos de lo más parecido a Dios Padre que pueda engendrarse en la tierra (4).
Sus virtudes se enlazan unas con otras para que los Papas lo declaren polivalente (2).
De manera especial quisimos proponerlo como modelo inigualable -pero imitable- para los sacerdotes que son padres de Cristo en su cuerpo místico y en su cuerpo eucarístico. (7,9).
Al editar este volumen, que incluimos dentro de la Colección Testigos, fue nuestro deseo refrendar nuestros conceptos mediante la autorizada palabra de los Sumos Pontífices cuyas citas repartimos a lo largo del trabajo.
Hemos incluido los blasones eclesiásticos de los Papas. Los heraldistas nos dirán en qué forma cada uno de esos escudos se refiere al origen, a los ideales o a la época del respectivo Pastor universal. Agregamos el lema o divisa del escudo heráldico; para los dos primeros en lugar del lema o mote oficial, pusimos una frase proveniente de la tradición.
No nos queda sino pedirle a Dios que a todos a quienes llegue esta publicación, Nuestro Padre San José los bendiga con su paternidad de egregio patrono, y los motive, en unión de sus familiares y sus colaboradores, a vivir la fe en la Iglesia en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
Carlos José Ruiseco