Reseña

LA REFLEXÍON A LA ACCIÓN en los últimos seis años y como todo en la vida, tiene su comienzo y su final, ahora, dando sentido a mi quehacer de Socio de la Sociedad de mejoras Públicas de Manizales

Con los anteriores artículos, termino un momento de mi vida muy productivo, no solo a nivel intelectual sino espiritual, con el cierro una “Gestal”, que inicie el año 2009 en mi aceptación como Socio de la SM, donde me propuse formular un Plan de Acción (2010) para celebrar el centenario de la Institución, una especie de renovación de la SMP de Manizales, viejo propósito, desde que fui miembro del Consejo Superior de la Universidad de Caldas(2004 a 2007) fui invitado por varios socios a la SMP.

Entre los aspectos que motivaron mi trabajo está la construcción de una ciudadanía activa en la ciudad y el cómo lograr una política pública, para preservar el patrimonio natural (agua, bosques e una ciudad sostenible?.

Para su desarrollo, se propuso el Civismo Activo como marco operativo de la Reflexión a la Acción, incorporando una expresión de participación política “El Concejal 20”, figura que posibilito un espacio deliberativo en el Concejo de Manizales, ya fuere, desde la barras o en documentos escritos e intervenciones a nombre de SMP y de las “Nuevas Ciudadanías” de la Ciudad.

Un SER llamado ciudadan@s Manizaleños y nuestros patrimonios naturales, como: el Agua, las cuencas hidrográficas base de la vida, nuestro medio ambiente, la diversidad de nuestra flora y fauna, caracterizada como de "media montaña Andina" o la Aldea encaramada de Albeiro Valencia.

Estamos hablando de una utopía de aquello: que-no-sido-pero-que-puede-ser, un escenario de Ciudad anclado en lo objetivamente posible, en el clamor de los nuevos tiempos, de la exigencia de un cuidado digno de “seres para la vida”, de una “ética de la especie”, en la predica de un hábitat que encante y dignifique los Manizaleños del siglo XXI,

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