El mundo como obra de arte
En busca del diseño profundo de la naturaleza
Autor: | Wilczek, Frank |
Colaborador: | Sampedro, Javier (Traductor) |
Los humanos admiramos la belleza. Y a pesar de lo que algunos parecen creer, no se encuentra únicamente en las denominadas artes, como la pintura o la escultura, también se halla en la ciencia. Frank Wilczek, Premio Nobel de Física de 2004, reflexiona en este hermoso libro, El mundo como obra de arte, sobre la pregunta de si el mundo encarna ideas bellas o, expresado de otra forma, si el mundo es una obra de arte. En una tan iluminadora como original revisión del pensamiento científico, desde Platón y Pitágoras hasta la actualidad, Wilczek argumenta que la gran guía en la búsqueda de las leyes que gobiernan el universo ha sido, y continúa siendo (como ilustra su propio trabajo científico, la idea de que este engloba formas en las que los rasgos distintivos principales son la simetría-armonía, equilibrio, proporción- y la economía. Esta es la belleza que «mece la cuna del mundo, la que subyace en su lógica más íntima, la que ha animado las investigaciones de científicos como Galileo, Newton, Maxwell, Einstein, Emmy Noether o Dirac. Incluso en la extraña y contraintuitiva física cuántica, las ecuaciones que rigen el comportamiento de los átomos y de la luz son casi literalmente las mismas a las que obedecen instrumentos musicales. Y así, cuando encontramos que nuestro sentido de belleza se realiza también en el mundo físico, descubrimos no sólo algo sobre el universo sino también acerca de nosotros mismos: que sus reglas más profundas son algunas que de alguna manera ya sentíamos, como si estuvieran esculpidas en nuestras almas.