Reseña

En su obra póstuma, Mario Levrero se entregó a la tarea de escribir una novela en la que fuera capaz de narrar ciertas experiencias extraordinarias, que él denominaba "luminosas", sin que perdieran tal cualidad. Una tarea imposible según confiesa más adelante, pero en la que se embarca con el "Diario de la beca". En cada una de las entradas de este diario, que recorre un año de su vida, el autor nos habla de sí mismo. El miedo a la muerte, el amor, la pérdida de amor, la vejez, la poesía y la naturaleza de la ficción, las experiencias luminosas e inenarrables: todo cabe en esta monumental obra.