Reseña

El plan de vida es un acto de resistencia cultural, donde los Barí mantenemos la lucha para sobrevivir desde la palabra, desde los argumentos, desde la visibilización de los procesos que consideramos necesarios para nuestra pervivencia. Es un acto de diálogo con la sociedad mayoritaria, para que entienda que nuestra supervivencia es un deber común, pues somos parte integral de este territorio que generalmente llaman Colombia, del cual hace parte Ishtana.
Este documento se convierte en un hilo conductor que interrelaciona y articula la armonización con los demás vecinos y con las instituciones del Estado. Consideramos que los planes de vida, desde el punto de vista filosófico, organizativo y político, son una herramienta que permite generar una discusión al interior de las comunidades y al exterior, con las instituciones nacionales o internacionales, en la definición del futuro de nuestro pueblo Barí. En él se consignan metas, estrategias, directrices y políticas a seguir en un tiempo y en un espacio determinados, dentro de los límites que impone un presupuesto, calidades técnicas y humanas establecidas, así como la disposición de los instrumentos, mecanismos y acciones que se usaran para alcanzar los fines propuestos, que son la motivación del plan.
Para la construcción de este documento la comunidad escogió seis líderes para que recorrieran el territorio y visitaran a cada sabio, a cada líder, a cada mujer y a cada niño, a cada ser, que dialogará para recobrar cada voz que vive en nuestro territorio. Se armaron para esto, capacitándose en la utilización de herramientas metodológicas como encuestas, grupos focales, entrevistas de profundidad; ellos mismos construyeron paso a paso cada arco metodológico y al final de igual forma se capacitaron para que hicieran los respectivos análisis. Primero debían hacer el diagnóstico para saber qué había pasado después de la formulación del primer plan de vida, con que metas se habían cumplido y con cuales no en cada una de las comunidades del pueblo Barí. El panorama no es muy alentador, las problemáticas han aumentado, pero esto motivó a que en la reconstrucción del Plan de Vida se hiciera un llamado más categórico para el cumplimiento de viejas y nuevas metas. Ahora se proyecta un texto dirigido aún más, para que la sociedad colombiana se comprometa a la construcción de una población Barí con autonomía cultural, con un eje central que es el territorio, con principios de conservación, con una conciencia muy clara de su cultura, la cual hay que perseverar, convirtiéndose este en el reto mayor “una conciencia étnica basada en una lengua común, un mundo normativo común, un mismo biotipo, una vida material compartida y un territorio común”.
Esta actualización se enmarca en las 23 comunidades del pueblo Barí que se han asociado en la Ñatubaiyibari, Entidad de Carácter Público Especial reconocida por el Ministerio del interior, que reivindica los procesos de participación con todos los miembros de la comunidad. Este trabajo fue un ejercicio necesario para que pudieran reflexionar sobre su historia, identidad cultural, uso y manejo de su territorio y recursos naturales, educación, salud y organización; y tomar conciencia de los problemas que afectan e identifican alternativas y soluciones que marcan el cambio a seguir en la búsqueda constante del equilibrio entre el hombre, la naturaleza y los seres que lo habitan.
La actualización de plan de vida del pueblo Barí tuvo por guía esencial la ley de Sabaseba, que da sentido a ser Barí, a su identidad, su relación con el cosmos, la naturaleza y con el entorno, refleja el espíritu, la historia y los modos de ser, de vivir, los usos y costumbres.
De tal forma que el presente texto es una carta de navegación, el acuerdo entre líderes, miembros, comunidades en general, familias, alrededor de los sueños de un futuro, que coordina las formas de habitar el territorio y las formas de relacionarse con la sociedad, incluyendo sobre todo al Estado colombiano, con todos sus mecanismos de acción, normas, procedimientos y formas de relación particulares para con las comunidades; definir una ruta a seguir para mantenerse como pueblo y mejorar las condiciones de vida, conectar el pasado con el presente y el futuro en beneficio de las nuevas generaciones, parte de la identificación de la realidad en un momento histórico del pueblo Barí, que le propone nuevos retos en la construcción de soluciones a problemas y a retos.
Para la construcción del plan de vida InchidjiChibidondomain partimos de los siguientes principios:
1. Ley de Sabaseba, la guía fundamental del Barí para vivir en el territorio.
2. El Respeto por la Diversidad Étnica y la Identidad Cultural, como el derecho del pueblo Barí a reafirmar y reproducir las instituciones, formas de organización, valores y prácticas propias de su cultura y ejercer control sobre el cambio cultural.
3. La Autonomía como derecho a tener un gobierno propio y políticas acordes a las necesidades, tradicionales y costumbres, a regirse por su derecho consuetudinario.
4. Territorialidad, como el derecho a la integridad del territorio, a la ocupación y recuperación de áreas de asentamiento, a la circulación, a las actividades económicas, sociales y culturales que garanticen la supervivencia y el desarrollo del pueblo Barí, así como el derecho a la propiedad colectiva, adquirido conforme a la Constitución y las Leyes.
5. Resistencia, como el derecho a pervivir como cultura, a establecer nuestro pensamiento como válido para interpretar las realidades y darle respuesta a los problemas y necesidades que se presentan.
6. Buen vivir, como el derecho a los pueblos a desarrollar políticas, programas y proyectos, que estén en armonía con nuestra cosmovisión, donde la ganancia economicista no es el eje fundamental, quitándole preminencia al sentido devastador del desarrollo según la visión occidental.
7. Sustentabilidad, como el derecho de las generaciones presentes y futuras al manejo, uso, conservación, aprovechamiento racional y al beneficio de los recursos naturales en sus territorios.
8. La Coordinación, Subsidiaridad y Concurrencia El diálogo y la concertación como ejercicio permanente entre el pueblo Barí y el Estado, en el cumplimiento de las metas de desarrollo trazadas en el presente Plan, a partir de los términos estipulados por la ley (Articulo 4, ley 136 de 1994).
9. La Participación, como base para el desarrollo y mejoramiento de las condiciones y calidad de vida del pueblo Barí, y como el derecho a la toma de decisiones y a la concertación, gestión, ejecución y control de las actividades que lo afectan.
10. El Reconocimiento de las Autoridades Tradicionales.
11. La Organización, fortalecimiento de los procesos organizativos en cada una de las comunidades. Reconocer a ÑATUBAIYIBARI como una estructura administrativa, organizativa y representante de las 23 comunidades Barí para la gestión e interlocución entre el Estado, otros entes no gubernamentales y el pueblo Bari.
12. Oportunidad, para que nuestros hijos sean Barí como nuestros antepasados, que defiendan nuestra historia, nuestra raza guerrera, que sean protectores de nuestro territorio, que sean Barí de generación en generación.
13. La Esperanza, porque esperamos contar con el apoyo de los entes gubernamentales y no gubernamentales para alcanzar nuestras metas de un buen vivir social, económico y cultural.
Los aspectos para un buen vivir que se integró en la actualización plan de vida son: Territorio, medio ambiente, organización, incidencia política y política pública, vivienda, salud, educación, economía, juventud y niñez, deporte, justicia propia y derechos indígenas, mujer, discapacidad y adulto mayor, servicio saneamiento básico, cultura, medios de comunicación y nación Barí.
Para el pueblo Barí, es fundamental que conozcan esta actualización del plan de vida en los 16 componentes y los vean como una unidad, que se articula, que debe cumplir organizadamente, si se tiene el real interés en la pervivencia del pueblo Barí. Este documento esta socializado y avalado, con conocimientos suficientes y amplios, por las autoridades tradicionales, los niños y las niñas, los jóvenes, los sadou (sabios y sabias). Ellos conocen lo que se propone y han participado directamente en el análisis que se ha hecho; creemos que se ha fortalecido nuestra forma de vivir, el medio ambiente, la cultura, el trabajo y el mundo exterior, siguiendo lo que Sabaseba nos indicó, este documento marca el comienzo de volver a los caminos ancestrales para mejorar nuestro futuro, para dar más conocimiento, con capacidad de liderazgo entre los jóvenes, para la comunidad, para Ñatubaiyibari.
Esperamos les sea útil y que compartan el camino que se debe recorrer, aunando comentarios e ideas para enriquecer este, los materiales y los procesos que vamos a producir.