Reseña

Cartas, poemas, libros... El amor es y siempre será nuestra más grande inspiración con todas las emociones que lo envuelven.

Ira, miedo, ternura, tristeza, alegría, entre otros sentimientos que producen deseos y pasiones, ocultos unos y expresados por nuestra propia voz otros más, o por el instinto delator que utiliza nuestro cuerpo, nuestra mirada, nuestro palpito, para recordarnos que simplemente estamos vivos y que siempre habrá un motivo para soñar y enamorarnos.

Somos humanos, seres que hemos avanzado en la escala evolutiva de la vida, sin embargo, somos instinto, personas que viven entre emociones y pasiones, y cuyas acciones son aún guiadas por nuestro "explosivo" sentir.

No importa cuán racionales seamos, ni cuán morales, lo instintivo siempre seguirá buscando espacio en nuestro ADN. Sólo cuándo lo aceptamos como emoción y nos hacemos cargo con comprensión es que podemos ser verdaderamente libres!

¡Somos instinto! sentimientos correspondidos o no, emociones no expresadas que quedan atrapadas en pensamientos y suspiros pero que las palabras nos han permitido liberar y camuflarse entre los mismos lineamientos de la sociedad.