Reseña

?Después de su controversial novela Una trama disoluta (2011), Héctor Monroy Ayala remoza su reputación de hombre serio con su segunda novela, La importancia de morir la víspera, que sí exige su trasfondo de profesor universitario e investigador científico. Uno de los personajes es un soldado napoleónico aficionado a regalar cosas curiosas, quien, en Asia, sufre unas circunstancias tragicómicas como resultado de la erupción de un volcán. Curiosamente, otra serie de acontecimientos geológicos y meteorológicos del futuro afectan a las siguientes generaciones de su familia hasta su tataranieto, un científico agnóstico de mentalidad racional. Este personaje, protagonista de la novela, en el ocaso de su vida sufre una demencia senil que lo vuelve supersticioso, convencido de que su familia tiene un destino trágico, y decide romper la maldición por medio de un complicado método, que concibe gracias a su bagaje científico, ahora mezclado con elucubraciones esotéricas?.

Jaime Luis Gutiérrez Giraldo, Columna de Opinión Cavilaciones, Periódico Vanguardia Liberal, Bucaramanga, Colombia, 10 de octubre de 2015.