Reseña

VIVENCIAS es un libro inspirado por el más hermoso sentimiento de un hombre a una mujer "EL AMOR". Ese sentimiento que por años ha sido mi gran ilusión, el amor a aquella mujer a quien se mira en la distancia, nos alegra su sonrisa, su mirada, su voz, colmando nuestros sueños, y para quien quizá solo somos invisibles. Es la mujer a quien impacientes esperamos y quien un día menos esperado se nos cruza en frente, se tropieza con nosotros, deja caer los libros o nos tira su café, el amor tiene muchas coincidencias para escoger y una de ellas es la nuestra.

VIVENCIAS no es mi biografía personal, es el conjunto de sueños y anhelos que quizá todo hombre como yo, construye en su caminar por este mundo. Todos soñamos con esa persona quien nos ame y a quien amemos, quien nos entregue su vida y acepte la nuestra. Pero la prisa por encontrarla nos lleva a cometer errores y fracasos que a la larga deja víctimas inocentes, quienes pagan culpas ajenas, convirtiendo ese sueño de amor, en la peor pesadilla vivida, y es irónico porque las locuras las cometemos los adultos y los que van al psicólogo son los hijos. Así es el vivir, para quien confía en su propio esfuerzo, su corazón es soberbio y arrogante, creyendo que lo alcanzado, es resultado de su constancia, esfuerzo y disciplina, sin reflexionar que nada es posible sin el aliento de vida que Dios nos regala día con día y eso, mi querido amigo es mucho, mucho más que cualquier otra cosa.

VIVENCIAS es un libro que recopila pensamientos, nostalgias, deseos, pasiones, e inspiraciones que fueron sembrados, regados, han crecido, madurado y evolucionado siendo ya hora de la cosecha que como regalo de Dios, alimentara los corazones de aquellas personas que con oídos del espíritu entiendan las canciones de mi alma.

VIVENCIAS es un canto a la mujer ideal que un día Dios en su Infinita Sabiduría, creo para cada uno de nosotros, a quien amamos e idealizamos con ciertas características sociales, morales, físicas, sexuales que es todo lo que nuestro corazón anhela antes de siquiera conocerla, tal y como si fuéramos a un autoservicio y pidiéramos una hamburguesa doble con queso, cebolla, tomate, mayonesa y pepinos (esta es mi preferencia, no sé cuál sea la suya). Pero Dios no trabaja de esa manera, si sabemos esperar con la paciencia que nos pide Él nos la dará, tal y precisamente como la necesitamos y nos conviene, mas no como la pedimos o la queremos, lo lamentable es que cuando nos la da como Ayuda Idónea, Carne de nuestra Carne y Hueso de nuestro Hueso, (en el caso del hombre), muchos no la valoramos, y la vemos como un objeto de nuestra propiedad y uso, que nos tiene que servir y soportar todo el daño que le hacemos, cuando Dios dice al hombre que hay que amarla y tratarla como a vaso frágil de fina porcelana. Y respetar y ser llena de virtud (en el caso de la mujer). La gran mayoría de hombres no entendemos que aquel pétalo de rosa que tenemos a nuestro lado, que nos apoya, y soporta cumpliendo estoica con el pacto hecho ante Dios de amarnos en lo bueno y en lo malo, en la salud y en la enfermedad, en la pobreza y la riqueza, hasta que la muerte nos separe, es aquel regalo que hemos esperado siempre y que Dios nos dio desde el inicio de nuestras vidas, es esa costilla que tomo de nuestro costado y la formo mujer para volverla a ponerla como parte indivisible e inseparable dentro del hombre, es aquella que conoce nuestro punto más débil sin tomar ventaja de él, quien nos da la fortaleza y apoyo en momentos de debilidad, con oración ferviente cuando tropezamos y caemos debilitados en la fe, aquella mujer que con sus besos y caricias nos reconforta en los momentos de ansiedad y de fatiga, quien tiene el don de la fe, la paciencia y de la oración incondicional, aquel complemento de vida que nos pone a temblar de emoción, nos hace sentir cosquilleo en el vientre y un deseo porque las horas pasen para poder disfrutar de su compañía, ese alguien que nos hace reír sin motivo, sin importar el lugar o el momento, aquella persona que nos hace mirar el cielo pintado con colores de arco iris, aquella mujer por quien el mismo universo se nos hace pequeño, es todo aquello que nosotros nunca podremos ser.

VIVENCIAS no pretende ser un libro de Psicología barata que analiza la problemática social nada más, sin crear soluciones, eso se lo dejo a los profesionales en la rama, este libro que presento a ustedes trata solo de ser una luz en el camino sembrando la semilla del amor puro y verdadero en los corazones sensibles a donde pueda llegar, y que nos lleve al encuentro con nuestra esencia.

VIVENCIAS no es un libro religioso, aun cuando usted encuentre connotaciones que mencionen a Dios, la razón y respuesta es simple, soy de fe Cristiana, aun cuando me encuentro en una lucha constante con muchos tropiezos y tibieza espiritual, convencido sí que no hay mas centro de mi existencia que aquel que me creo, me redimió y me puso nombre nuevo, por quien he escuchado las buenas nuevas de ese amor y esa fe que nos de paz, esa paz que sobrepasa todo entendimiento humano.

VIVENCIAS es un libro sembrado en mi juventud rebelde, melancólica, triste, anhelando por ese alguien que calme la ansiedad y soledad, y en mi clamor incierto me fue regalada la inspiración como fruto del corazón y de la infinita sabiduría y misericordia de Dios, para que letra por letra y punto por punto este libro fuera creado, llenándolo de ese sentimiento invisible, naciendo así el primer eslabón para alimentar a cada corazón que se encuentre sediento y hambriento de ilusiones, pues incurable es el dolor a causa del olvido que es la herida del dardo enemigo que no cicatriza jamás, y que he tratado de recopilar en estas páginas como inicio y final, como gritos de voces silenciosas, como susurro del viento ensordecedor, como frió que nos quema o un calor que nos enfría, dentro de todos ese paisaje de ausencia infinita, de ausencia indomable, con sentimientos encontrados de lo que pudo ser y no fue, del esfuerzo no puesto y del que se perdió, de ese flanco inquebrantable que nos lleva a la derrota, de entender y no entender la sorpresa y estupor de encontrarnos en el valle tan oscuro del silencio mudo y ciego donde el amor nos hace ser caballeros de vieja armadura que en un viejo Rocinante levantamos la batalla con monstruosos molinos de viento para rescatar a Dulcinea, construir Palacios de Cristal y los puentes en el cielo, haciendo viejas sendas en los campos de oro, esmeraldas y rubíes, provocando la nostalgia, provocando la pregunta, de si el tiempo llega o no pasara, de si aprendimos algo o nada quedo. Que sea la semilla para compartir el inmenso amor de Dios, que sea además testimonio de mi entera transformación, de que mi andar es arduo pues angosto es el camino y la puerta estrecha es.