Reseña

Enrique Umaña Barragán
Ciencia y política en la Nueva Granada
Por José Antonio Amaya

Nacido en Bojacá en 1771, Umaña Barragán es un fascinante personaje que viene a ser conocido en todo su esplendor gracias a varios años de investigación soportada por archivos públicos y privados que abarca Colombia y Europa en este ensayo del historiador J. A. Amaya, uno de los grandes especialistas en la Expedición Botánica. El emblemático Umaña, a sus 24 años de edad, es desterrado y apresado en los calabozos españoles del castillo de San Sebastián en Cádiz, por haber conspirado junto con Nariño y otros patriotas en la traducción de los Derechos del hombre. Cumplida parte de su condena que le costó cinco años, y exonerado de los cargos, estudia Derecho y se gradúa como uno de los primeros abogados que ejerce en la Nueva Granada. Paralelamente, estudia mineralogía con la pléyade de científicos españoles y franceses de la época. Con esos conocimientos se integra a la Expedición Botánica de José C. Mutis en 1802, sin sueldo y sin retribuciones.
 Al mismo tiempo, estudia la quina y sus propiedades y se convierte en investigador y productor a gran escala de algunas de variedades que exporta a Europa. En 1816 logra salvarse de la pena de muerte tras una acusación infundada de Pablo Morillo. Ya consolidada la Independencia se embarca en la vida política como intendente, juez, alcalde, corregidor y otros cargos o participa en sociedades filantrópicas e incursiona en empresas. Cercanísimo a Bolívar, con su familia provee al Libertador de auxilios y favores. Muere en 1854, en Tequendama, la vieja propiedad de esa familia, adyacente al propio Salto de Tequendama .
 Científico de primer orden, fue pionero investigador de la quina que salvaría miles de vidas, abogado de causas nobles, prócer, y enemigo declarado de la dominación española. Umaña Barragán articuló una vida de entrega a su país y su familia en todo su desarrollo: Colonia, Independencia, República.