Reseña

El libro plantea la primera metateoría curricular en Iberoamérica a partir de la diferenciación entre crítica ideológica y crítica informacional al diferenciar, entre otras, la sociología clásica y la no clásica del conocimiento, producto de más de un decenio de investigación a partir de los resultados de la tesis doctoral del autor. Proporciona crítica sistémica aplicada al currículo escolar por lo que propone como nuevo paradigma la metateoría curricular neosistémica con base en la clasificación: currículo asistémico y currículo neosistémico, al advertir la crisis de la filosofía y la sociología críticas de la educación. Entre los desarrollos metodológicos y con base en la redescripción y reespecificación de la investigación-acción precedente, propone la investigación-acción autopoiética para la configuración del modelo de desarrollo institucional integrado neosistémico. Se trata de aportes configurativos de tecnología curricular neosistémica en atención al déficit tecnológico de la pedagogía desde el siglo XVIII y la crisis de conocimiento crítico en las tecnologías de la información y la comunicación, en las tensiones que proporciona la distinción entre los sistemas positivistas en educación y pedagogía derivados de la relación input/output que ejecuta la autoorganización propuesta por la teoría general de los sistemas formulada por Ludwig von Bertalanffy, constitutiva de teoría de la reflexión en la primera modernidad, por una parte y, los sistemas no positivistas ni neopositivistas que posibilita la teoría de los sistemas sociales propuesta por Niklas Luhmann en el marco de las teorías de la reflectividad en la segunda modernidad, por la otra parte. Uno de los aportes más representativos de la metateoría curricular neosistémica es haber instalado en el campo de conocimiento en currículo escolar y, por tanto, en el campo de la educación y la pedagogía, el debate de una historicidad epistemológica de las ciencias sociales en la intelección de la historicidad epistemológica de los sistemas, dilucidada de la historicidad epistemológica de la autorreferencialidad en Occidente, en razón a la crítica informacional aplicada al currículo de la segunda modernidad que procura el debate primera-modernidad/segunda-modernidad frente al debate precedente, modernidad/posmodernidad.