Estación Nocturna
Casa de Citas 20 años
Autor: | González Gómez, Carlos Adolfo |
Colaboradores: | Roca, Juan Manuel (Director) Linero, Guillermo (Prologuista) |
Durante una buena lonja de años, personas de varias generaciones nos hemos encontrado, como en una “Estación
Nocturna”, en “Casa de Citas”.
Ha sido una cita puntual con la música, con la poesía, el baile, la pintura y la palabra humedecida en el bien
mezclado coctel de la amistad, en la ronda de la interlocución y de la fiesta.
Han sido unos detonantes años que han caído en el largo otoño de unos calendarios en los que hemos visto
muchos espejismos sociales y políticos pisoteados, pero ningún sueño abolido, ningún arte en extinción.
Han sido, también, y de qué rumorosa manera, años de renovar a cada tanto una cita imprevista y de rebasar
con imaginación los gestos de desaliento a los que incita, no pocas veces, el país.
Este libro, “Estación Nocturna”, es un diario intermitente de hechos y artistas de todas las vertientes y disciplinas
que han pasado por “Casa de Citas”.
Esta ha sido una casa que además es albergue y estación, lugar de resistencias, salón de baile, recinto donde
el brazo se hace abrazo.
Músicos del jazz y del blues, cantantes de los aires antillanos, compositores e intérpretes de la rica y diversa
música colombiana, figuras de los aires de una Suramérica profunda, virtuosos del tango y el bolero, han entrado
por su puerta y se han vuelto reincidentes.
También ha sido refugio de actores y poetas provenientes de ese gran mapa sin fronteras que es el arte, desde
un espíritu ajeno a lo gregario que siempre termina por vadear aduanas lingüísticas y regionales.
Lo mismo ha reunido, bajo un mismo techo, a través de debates y coloquios sobre las circunstancias sociales
que han acompañado a este pedazo de mundo convulso que vivimos, en un ejercicio de libertad en la palabra.
La casa nos ha dado cobijo en esas noches bogotanas que a veces, con su frío de cuchillo de esquimal, podrían
desalentar cualquier festejo. Nos ha hecho inquilinos de goces compartidos.
De todo ese extenso recorrido el volumen de “Estación Nocturna” nos da cuenta de manera amplia y divertida.
Es un original intento por condensar una esquirla importante de las noches bogotanas.