Reseña

¡EL QUE ESTE LIBRE DE PECADO QUE TIRE LA PRIMERA PIEDRA! ¡Jesús!, ¡jamás dejará de sorprendernos! Y ese, era uno de los propósitos de Dios al enviarlo aquí a la tierra de los mortales, revelarle realmente lo que existía en su corazón, y lo haría a través de la encarnación de su amado hijo. Y todo, para que algún día comprendiéramos, que esa frase de Jesús, era ordenada por El a su corazón, y misteriosamente ella, nos hiciera comprender a todos, lo cerca o lejanos que estábamos de la verdad divina y de sus juicios. Esta obra, sólo inspirada por su Santo Espíritu, nos llevará a comprender muy de cerca, quienes en realidad estaban cerca del corazón de Dios y quienes no lo estaban. Y el mundo se va a sorprender, de lo que hay revelado de parte de su Santo Espíritu en esta obra, y que sólo es de Dios para el corazón de la humanidad. El, ¡Dios!, es un luchador incansable por lograr la salvación de su creación, y es a El quien le ha placido nuevamente levantar su voz, para abrirle los ojos la humanidad, y para llevarnos de nuevo a su camino, porque sólo con los ojos del Espíritu Santo de Dios, que son la presencia del Padre y del Hijo morando muy dentro de nosotros, nos llevarán a la luz, y sólo en su luz, entenderemos este glorioso momento de los pasos de su amado hijo Jesús, y porqué El se constituyó camino a la cruz, en el Juez de Jueces.