Cuentos para vaciar el crepúsculo
Autor: | Ramírez Uribe, María Teresa |
Julio Cortázar dijo alguna vez que si la novela gana por puntos, el cuento gana por knock out! Mis hermanas dicen que yo puedo escribir un cuento a partir de una receta de cocina. Ambos tienen razón. Escribir un cuento los para mi una aventura divertida, una especie de pausa y descanso cuando estoy escribiendo una novela, una biografía o un ensayo, que son ejercicios más demandantes. El metro, los autobuses y los consultorios me han servido a veces de inspiración, y las personas con sus prisas, sus vestimentas y sus reacciones, me proveen de historias imaginarias que voy acoplando en mi mente, quizás con un poco de culpa por apropiarme sin permiso de sus vidas. En otras ocasiones, la historia nace de un episodio que viví o de una conversación que escuché, pero nunca, mientras escribo un cuento, estoy segura de cuál va a ser su final. Estos quince cuentos que van a leer son el resultado de varios años de esas aventuras en las que mi fantasía ha volado sin códigos ni fechas para cumplir. A algunos les tengo más cariño que a otros, pero son ustedes, los lectores, quienes al final de este libro dirán si hubieran querido leer un poco más… El metro, los autobuses y los consultorios me han servido a veces de inspiración, y las personas con sus prisas, sus vestimentas y sus reacciones, me proveen de historias imaginarias que voy acoplando en mi mente, quizás con un poco de culpa por apropiarme sin permiso de sus vidas. En otras ocasiones, la historia nace de un episodio que viví o de una conversación que escuché, pero nunca, mientras escribo un cuento, estoy segura de cuál va a ser su final. Estos quince cuentos que van a leer son el resultado de varios años de esas aventuras en las que mi fantasía ha volado sin códigos ni fechas para cumplir. A algunos les tengo más cariño que a otros, pero son ustedes, los lectores, quienes al final de este libro dirán si hubieran querido leer un poco más… Estos quince cuentos que van a leer son el resultado de varios años de esas aventuras en las que mi fantasía ha volado sin códigos ni fechas para cumplir. A algunos les tengo más cariño que a otros, pero son ustedes, los lectores, quienes al final de este libro dirán si hubieran querido leer un poco más… María Teresa Ramírez U.