Reseña

En el marco del Plan Sectorial 2006 – 2010, el Ministerio de Educación Nacional, a través del Observatorio Laboral, ha desplegado acciones para que las Instituciones de Educación Superior visibilicen el impacto y pertinencia de sus programas formativos en el medio y de esta manera, se realicen procesos regulares de reestructuración y evaluación de las ofertas técnicas, tecnológicas y profesionales de las Instituciones de Educación Superior. En este contexto se ubicó el proyecto “Apoyo al proceso de seguimiento a graduados de la Fundación Universitaria Panamericana”, con el propósito de responder, por una parte, a la política Nacional de Competitividad y Productividad impulsada por el Gobierno Nacional y desde luego, a los objetivos misionales de la Universitaria Panamericana, en los cuales se enfatiza en la necesidad de orientar los programas hacia una educación pertinente frente a las necesidades del entorno, a través de procesos de autoevaluación permanentes que involucren las voces de los docentes, egresados, sector productivo y el ámbito social en general. Es justamente en este escenario en el que emerge el interés por evaluar el programa Técnico Profesional en Documentación de Procesos de Calidad de la Institución Universitaria Unipanamericana, de manera tal que se propongan, de ser necesarios, ajustes a su apuesta formativa y a su vez, a las proyecciones del programa de tecnología en Gestión de Procesos de Calidad y profesional en Calidad. A esto se suma la necesidad de diseñar un modelo de evaluación de pertinencia de programas académicos que permita replicar la experiencia en otros programas de formación. El informe está estructurado por el modelo de evaluación de pertinencia del programa académico, a partir del cual, se realiza la valoración del programa en mención. Seguidamente, se ubican los resultados obtenidos en el primer momento, allí se aplicaron encuestas a empleadores y egresados del programa técnico profesional en documentación de procesos de calidad, además, se presentan los resultados obtenidos por la encuesta del Observatorio Laboral del Ministerio de Educación Nacional. Posteriormente se señalan los resultados que emergieron del proceso de validación de la información, siendo este el tercer momento. Luego, se encuentra el análisis de las ofertas de empleo que se hacen en este campo de estudio a fin de hacer visible el escenario empresarial y las necesidades manifiestas del sector productivo para el programa técnico, tecnólogo y profesional en calidad, para después realizar un análisis interpretativo del panorama expuesto y realizar sugerencias de ajustes al plan de estudios. Es de advertir para entender la noción de pertinencia es preciso comprender las relaciones complejas que la universidad ha mantenido con el entorno natural, social, cultural, económico y político. Relaciones que han de ser analizadas desde miradas holísticas, completas, integrales. “Se trata de formar personas con una elevadísima capacidad intelectual y creativa, asociada también con una muy alta sensibilidad y tacto social e interpersonal” , sin dejar de lado, por supuesto, la formación disciplinar, es decir, los fundamentos teóricos y metodológicos de su profesión. Esto no es un asunto secundario: el supeditar el currículum a las exigencias del mercado implicaría llevar a la universidad a la fluctuación permanente de este y desdibujar su razón de ser, a decir, la producción de conocimiento: “la universidad deja de ser pertinente cuando centra toda su enseñanza en los procedimientos y no en los fundamentos” . Diseñar los currículos educativos con base en las demandas del escenario laboral desencadenaría en la formación de profesionales capacitados para desempeñarse en el contexto de las recientes innovaciones y construcciones científicas y tecnológicas pero al pasar del tiempo, estos saberes serían inútiles dados los cambios acelerados del entorno. Es de advertir que lo anterior no indica desconocer las exigencias y necesidades del sector productivo, las cuales configuran apuestas formativas precisas de tener en cuenta. En razón a esto, el Ministerio de Educación Nacional considera “el sector productivo como un aliado estratégico para diseñar, mejorar y emprender programas de formación de competencias laborales generales y específicas, así como para abrir espacios de práctica y observación de los estudiantes”.