Reseña

Confesamos que los santandereanos tenemos un reto. El reto es empezar por reconstruir la historia e iniciar lo propio con la semántica colectiva, su estilo cultural. Esta idea nos ha llevado por caminos inasibles, de bordes indefinidos como lo es también la razón cultural del pueblo santandereano; con este trabajo se ha venido logrando un verdadero espacio de representación socio-artística, de tal forma que las obras que contiene ya están ocupando un lugar privilegiado en la simbología y expresión social; como verán, fue un acto inductor de semántica, a la vez que creador y expresionista de aquella al mismo tiempo, yendo más allá de los límites de la razón cultural y del pensamiento mismo. No haber tenido una semántica de grupo basada en el conocimiento de la historia, nos ha permitido crear y recrear, hacer y rehacer, sin principio ni fin.